El comentario de este cuadro será breve, puesto que su contenido matiza y amplía, pero tam- bién es en parte redundante, con el del cuadro 3.2. En efecto, las columnas relativas al régimen General se comportan de forma similar a los datos del cuadro 3.2., al que acabamos de aludir. Respecto a Autónomos, la evolución en estos dos peri odos la podríamos calificar de especta- cular: todas las tasas son positivas y, excepto Cuencas Mineras en 2003/02, ninguna baja del 3%, esto es, los mínimos son muy altos. En Agrarios el panorama es muy distinto; catorce comarcas experimentan crecimientos negativos de 2002 a 2003, cifra que se eleva a veintiséis en el siguiente periodo; sólo seis comarcas escapan, en el sentido de crecer en las dos columnas de Agrarios del cuadro 3.7., a esta tendencia regresiva generalizada del campo aragonés: Alto Gállego, si bien con magnitudes positivas pero muy pequeñas, Valdejalón, Cuencas Mineras, Bajo Aragón, Gúdar-Javalambre y, con el mejor comportamiento, Bajo Aragón-Caspe/Baix Aragó-Casp. 3.3.3. La edad y la actividad laboral Una de las características fundamentales que definen el mercado laboral de un área geográfica de referencia es el relativo a la edad de su fuerza de trabajo. Y esto es así porque se trata de una variable acotada entre 16 y, en principio, 65 años y que es susceptible de presentar importan- tes variaciones intercomarcales y, sobre todo, entre los distintos tipos de regímenes de afilia- ción a la Seguridad Social. En todo caso es un aspecto que merece atención y que dota de con- tenido esta sección. Antes de entrar en ella debe valorarse que esta sección está íntimamente relacionada con la relativa a la estructura por edades de la población en general (apartado 2.4. de este Anuario). En efecto, que una comarca muestre una edad laboral media más alta que otra puede deberse a tres causas. Uno, a una diferente tasa de actividad por grupos de edad (véase el cuadro 3.1), en la que hay más participación en grupos más longevos. Dos, a características propias del propio mercado de trabajo como, por ejemplo, a la especialización en distintos sec- tores productivos. Y tres, a una mayor edad media de la población en general y, en particular, del segmento en edad de trabajar. Dicho esto, el cuadro 3.8. ofrece la edad media total (emt), la de los hombres (emh) y la de las mujeres (emm) para todos los trabajadores afiliados a la Seguridad Social en 2003 y 2004, así como la diferencia en la edad media en 2004 menos lo propio en 2003, que se recoge en las tres últimas columnas y de acuerdo a la magnitud de Diferencia en emt se ordenan las comarcas.