44 PRIMERA PARTE: VALORACION GENERAL DE LA ACTIVIDAD DEL ESTADO Y DE LAS CCAA La coalición PAR-PP ha salido globalmente reforzada, puesto que el pequeño bajón electoral del PAR se ha visto compensado con la subida del PP, alcanzando entre ambos partidos la mayoría absoluta en las Cortes de Aragón. La composición del Gobierno ha intentado reflejar un pacto igualitario entre PAR y PP, que se han distribuido a partes iguales las ocho Consejerías, reservando la presidencia del Ejecutivo al PAR y la de las Cortes al PP. Sin embargo, los enfrentamientos dialécticos, con una especial beligerancia por parte de destacados miembros del PP, han persistido. La no continuidad del anterior Pres idente (H. Gómez de las Roces), sustituido por otro miembro del PAR (E. Eiroa), se ha considerado necesaria para lograr un clima más5ropicio al diálogo y al pacto. El cambio se produjo con gran discreción, presentándose ante la opinión pública como la lógica solución de un problema de discrepancia personal del anterior Presidente con los términos del pacto de coalición. Si hemos de atenernos a las actividades con relevancia pública, lo cierto es que el Gobierno autonómico salido de las últimas elecciones ha incrementado los contactos con el Gobierno del Estado. Hasta el punto de que la voluntad de obtener pactos políticos en relación con una serie de temas concretos, pendien- tes de resolución, es quizá el rasgo que mejor caracterizaría al actual Ejecutivo aragonés. Y ello, tanto con referencia a problemas que afectan también a otras Comunidades Autónomas (programa de viviendas, financiación autonómica) como con respecto a problemas específicos de Aragón (autovía Somport- Sagunto, túnel de Benasque, pacto del 4gua, olimpiadas de invierno en Jaca). El recurso constante al pacto político es una manera de gobernar en cuya valoración aquí no se va a entrar, aunque sí cabe destacar que, junto a sus ventajas innegables, como la estabilidad institucional que proporciona, puede suscitar problemas importantes, entre otros, de pérdida o falta de diferenciación de las identidades ideológicas, de obsesión por el mantenimiento de una situación dada, de abandono de toda preocupación por las parcelas de poder cedidas y de dificultades para su traducción jurídica. La misma configuración del Ejecutivo refleja esos problemas. Las Conseje- rías se han dividido a partes iguales entre PAR y PP. No sólo eso. También se ha dividido el poder del Gobierno. Aunque no se ha procedido a nombrar Vicepresidentes, de hecho la situación política parece ser la siguiente: bajo el consenso general que proporciona el Presidente (del PAR), se desenvuelven dos grandes áreas de actividad, la política (controlada por el Consejero de Presiden- cia y Relaciones Institucionales, del PAR) y la económica (dominada por el Consejero de Economía y Hacienda, del PP). Ese esquema de gobierno resulta escasamente inquietado por la oposición parlamentaria de PSOE y CAA-IU. Este segundo grupo parlamentario se muestra, en proporción a su número de parlamentarios, más activo que el PSOE, aquejado por fuertes tensiones internas a las que en seguida se hará refe- rencia. -